miércoles, 18 de febrero de 2015

Apareció el "Duende del Flamenco"

El flamenco. Ese arte que, o se tiene o no. No me refiero a tener flamenco, sino a tener lo que hay que tener para sentir y transmitir el flamenco, De esto se trata este arte.
La empresa es difícil porque es algo que se debe llevar en la sangre de alguna manera o de otra. Aviso a navegantes: Yo no lo llevo...pero lo disimulo suficientemente como para enterarme de todo lo que se habla alrededor de él.
¿Y por qué os cuento todo esto? Ahora lo entenderéis.
He recibido el encargo por parte de un amigo de realizar una genealogía sobre los cantes y palos del flamenco. Esto era algo nuevo para mi porque requería algo más que creatividad. Se solicitaba sentimiento, orientación y mano izquierda como decía curro romero.
Gracias al empeño de mi amigo Miguelillo todo se hizo mucho más fácil. Fue mi guía espiritual. La parte creativa se cojió de la mano de éste espíritu y el duende del flamenco apareció.
Tengo que decir también que aquí el peso de la creación la llevó mi compare, que de esto entiende un taco. Cultureta del flamenco y tocaor en ciernes. Es un peaso de crack de este rancio arte (como suele decir él).
¿Estaréis impacientes por ver los resultados no? Pues como aquí lo que sobran son las palabras y lo que hace falta es compás e imágenes. Aquí os dejo un aperitivo para hacer boca.





jueves, 29 de enero de 2015

Finlandia: Ese gran país... ¿de la cerveza?

Siempre que me hablaban de los países nórdicos me venía a la cabeza los edredones, las suecas de las películas españolas y esos cabrones daneses que nos ganaban siempre a balonmano en los mundiales (ahora ya no, jejejeje).
Después de unos años de deficiente cultura adquirida y otros cuantos años más de documentales de españoles por el mundo, me he dado cuenta que los nórdicos son buena gente. Buena gente con unos países muy bien organizados y dignos de admirar y de copiar en la mayoría de sus aspectos. Sin ánimo de aburriros con las grandezas de Suecia, Dinamarca, Finlandia...voy a centrarme en el tema que me ocupa o me ha ocupado mis momentos de #diseñadorparado, #micurroesunamierda y #pobrehastaelfindemisdias.
He realizado un catálogo y un cartel para una marca finlandesa de cervezas, para un distribuidor e importador de mi localidad. Como siempre partíamos de la base de una deficiente información de base y de otra pobre muestra de lo que ya tenían, que no iba más allá del típico documento de word desestructurado socialmente. (los diseñadores sabréis de qué hablo).
Pues con los mimbres de casi siempre me dispongo a estrujar mi desmotivada pero creativa cabeza a ver que salía por el chistoso e irrisorio presupuesto que les había dado.
Consignas del cliente: "Foto de portada ésta y no muy moderno pero no muy clásico". Pues eso. Lo de siempre.
Después de rebanarme, untarme y comerme todo lo que esbozaban mis sesos, conseguí algo de lo que no sentirme avergonzado, que con la motivación que tengo últimamente es algo mas que digno de mención.
Pues nada, aquí os dejo el resultado para que opinéis y me confirméis si mi enfermedad tiene cura o no.

Gracias por vuestros minutos de lectura y por vuestro afán de conocer lo nuevo de este humilde ser.





´